Zona de Especial Protección para las Aves: Ubiña-La Mesa en Teverga
Introducción
La Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de Ubiña-La Mesa en Teverga fue declarada en el año 2003, abarcando una extensión de 39,352 hectáreas distribuidas entre varios municipios de Asturias, entre ellos Belmonte de Miranda, Grado, Lena, Proaza, Quirós, Teverga y Yernes y Tameza. Esta área se distingue por ser una zona de montaña de alta naturalidad y una gran diversidad de hábitats y especies de interés comunitario.
Detalles sobre el Patrimonio natural
La ZEPA de Ubiña-La Mesa en Teverga se caracteriza por su impresionante paisaje montañoso, donde se alternan grandes pastizales de montaña, densos hayedos, acantilados calizos y extensos brezales. Esta región alberga una excepcional representación de la vegetación montana cantábrica, con extensos bosques y matorrales que proporcionan refugio a una variedad de especies animales, incluyendo las principales especies amenazadas de vertebrados terrestres como el oso, el urogallo y la nutria.
Gran parte de la ZEPA está integrada en el Parque Natural Las Ubiñas-La Mesa, un espacio protegido que garantiza la conservación y gestión sostenible de este valioso ecosistema. Además, una porción significativa de su superficie cuenta con la consideración de Monumento Natural de los Puertos de Marabio y otra parte es reconocida como Monumento Natural de Cueva Huerta, ambos destacados por su valor paisajístico y ecológico.
Importancia del Patrimonio natural desde una perspectiva cultural e histórica
La región de Ubiña-La Mesa en Teverga tiene una profunda importancia cultural e histórica, marcada por siglos de interacción entre las comunidades locales y el entorno natural. A lo largo del tiempo, los habitantes de esta región han desarrollado una relación única con la tierra, reflejada en sus tradiciones, costumbres y formas de vida.
La presencia de antiguas construcciones pastoriles, senderos ancestrales y otros vestigios históricos en la zona atestiguan esta conexión duradera entre el ser humano y la naturaleza. Estos elementos culturales y arquitectónicos son testimonios vivientes de la historia local y contribuyen a la identidad de la comunidad.
La conservación de la ZEPA Ubiña-La Mesa en Teverga no solo es crucial para proteger la biodiversidad y los ecosistemas únicos de la región, sino también para preservar la rica herencia cultural y histórica asociada a este paisaje montañoso. Al proteger y valorar este patrimonio natural, se garantiza su disfrute por las generaciones presentes y futuras, asegurando la continuidad de las tradiciones locales y la conservación de este legado para las próximas generaciones.