Jilguero
Introducción
El jilguero, un pequeño y vistoso pájaro, ha sido durante mucho tiempo una presencia familiar y apreciada en Asturias, tanto por su abundancia como por su hermoso canto. Esta especie, con su combinación distintiva de colores en el plumaje, es fácilmente reconocible y ha cautivado la atención de observadores de aves y amantes de la naturaleza.
Detalles sobre el Patrimonio natural
El jilguero presenta una fisonomía característica, destacando la cara roja, el color negro y blanco de la cabeza y alas, y una franja alar amarilla ancha, lo que lo convierte en una especie inconfundible. Ambos sexos son similares, aunque se pueden distinguir por pequeños detalles en el plumaje, como el color rojo de la cara, más pronunciado en los machos. Este pájaro habita diversos entornos, desde huertos de frutales y parques hasta claros de bosques y áreas urbanas arboladas durante la primavera y el verano. Durante el invierno, se traslada a campo abierto y tierras cultivadas en bandadas, a menudo acompañado de otras especies de aves.
El jilguero construye sus nidos en árboles, arbustos grandes, setos densos e incluso en plantas de balcones y terrazas. Estos nidos tienen forma de pequeña copa y están elaborados con hierba seca, musgo, lana y pelos, generalmente cerca del extremo de una rama. Las hembras son responsables de la construcción del nido y, a mediados de abril, realizan la primera puesta de cinco o seis huevos de color verde azulado con puntos rojizos en un extremo. La incubación dura entre 12 y 13 días, y los jóvenes jilgueros comienzan a volar alrededor de los 13 días de vida. Su dieta se compone principalmente de semillas, aunque también consumen insectos.
El jilguero asturiano se caracteriza por ser de proporciones menores y tener un colorido menos vivo en comparación con el jilguero europeo occidental. Su canto, más líquido y musical, es una marca distintiva. Durante el otoño e invierno, muestra un comportamiento errático. Sin embargo, el jilguero europeo occidental, que presenta un tamaño mayor y un colorido más vibrante, es comúnmente avistado en Asturias durante el invierno, llegando en octubre y noviembre y desapareciendo en abril.
Importancia del Patrimonio natural desde una perspectiva cultural e histórica
El jilguero, junto con otras especies de aves presentes en la zona, forma parte del rico patrimonio natural de Asturias. Su presencia no solo contribuye a la biodiversidad local, sino que también enriquece la experiencia de quienes disfrutan de la observación de aves y la naturaleza en general. Además, el jilguero ha sido objeto de interés cultural e histórico, siendo mencionado en obras literarias y canciones populares, y su canto ha inspirado la creatividad de poetas y músicos a lo largo de los siglos. La conservación de su hábitat y la protección de esta especie son fundamentales para preservar la identidad natural y cultural de Asturias para las generaciones futuras.