Dolmen de Santa Cruz

«Enciclopedia asturiana»

Dolmen de Santa Cruz

Introducción

El Dolmen de Santa Cruz, ubicado en Cangas de Onís, es un monumento que refleja las épocas neolítica y medieval en la región. En este análisis, exploraremos su importancia desde una perspectiva cultural e histórica, así como sus características físicas y su relevancia como patrimonio cultural.

Detalles sobre el Patrimonio cultural

Situado en la Vega de Contranquil, entre los ríos Sella y Güeña, el Dolmen de Santa Cruz se erige como un testimonio de las antiguas poblaciones neolíticas que habitaban la zona. Construido alrededor del año 3000 a.C., este dolmen representa una arquitectura funeraria singular, construida con grandes bloques de piedra y destinada a servir como lugar de enterramiento y de culto comunal. Aunque los dólmenes son comunes en la región cantábrica, el Dolmen de Santa Cruz destaca por su ubicación en el fondo del valle, en un área estratégica de paso entre la costa y la montaña.

Importancia del Patrimonio cultural desde una perspectiva cultural e histórica

El Dolmen de Santa Cruz no solo es un monumento funerario, sino también un símbolo del poder y la autoridad de las comunidades neolíticas que lo construyeron. Su ubicación estratégica en una zona de tránsito entre diferentes regiones sugiere su papel como punto de encuentro y centro ceremonial, donde se llevaban a cabo ceremonias colectivas y se promovían los intercambios sociales y comerciales. Además, su presencia continuó siendo relevante durante la Edad Media, cuando el templo cristiano de Santa Cruz fue erigido sobre el montículo prehistórico, buscando legitimar el poder de los gobernantes locales al asociarlo con lugares sagrados ancestrales.

El contenido artístico del dolmen, incluyendo pinturas rojas y grabados en las paredes, revela una expresión simbólica y ritualista que trasciende el simple acto de enterramiento. Las decoraciones geométricas y los motivos abstractos sugieren una conexión con el mundo espiritual y la creencia en la vida después de la muerte. Esta combinación de arquitectura monumental y arte rupestre hace del Dolmen de Santa Cruz un testimonio excepcional del avance cultural y social de las antiguas comunidades prehistóricas en el territorio del Sella.

En resumen, el Dolmen de Santa Cruz no solo es un monumento arqueológico, sino también un símbolo de la conexión entre el pasado y el presente, entre lo natural y lo cultural. Su preservación y estudio son fundamentales para comprender la evolución de la sociedad humana en Asturias y su legado en la historia de la región.

 


Acccesos

 «A»   «B»   «C»   «D»   «E»   «F»   «G»   «H»   «I»   «J»   «K»   «L»   «M»   «N»   «Ñ»   «O»   «P»   «Q»   «R»   «S»   «T»   «U»   «V»   «W»   «X»   «Y»   «Z»