Monumento Natural Playa de Cobijeru
Introducción
La Playa de Cobijeru, situada en el concejo asturiano de Llanes, España, es un Monumento Natural de gran singularidad y belleza. Esta playa de interior, alejada del mar abierto, es una joya geológica que forma parte del Complejo de Cobijeru, declarado Monumento Natural en 2001.
Detalles sobre el Patrimonio natural
- Ubicación: La Playa de Cobijeru se encuentra en el fondo de una depresión de sustrato calcáreo, dentro del Monumento Natural Complejo de Cobijeru. Situada a tres kilómetros al oeste de la localidad de Buelna, esta playa se distingue por su peculiaridad geológica y su entorno natural único.
- Características físicas: Con una forma semicircular y dimensiones reducidas, aproximadamente 30 metros de longitud, la Playa de Cobijeru se encuentra rodeada de praderas y acantilados. Sus aguas, poco profundas, apenas alcanzan un metro de profundidad, y se conectan al mar a través de una grieta de decenas de metros, experimentando la influencia de las mareas y el oleaje.
- Arquitectura natural: El Complejo de Cobijeru, además de la Playa de Cobijeru, incluye la playa de El Molín, una depresión similar con suelo fangoso y vegetación, donde se encuentra un antiguo molino de marea. También forma parte del complejo la cueva de Cobijeru, de origen kárstico, que alberga estalactitas, estalagmitas y sedimentos fangosos. El entorno está marcado por un acantilado que separa la línea costera al norte.
Importancia del Patrimonio natural desde una perspectiva cultural e histórica
- Singularidad geológica: La Playa de Cobijeru y su entorno representan una singularidad geomorfológica del litoral de Llanes. La formación de estas playas en dolinas próximas a la costa, con galerías subterráneas que conectan con el mar, es un fenómeno único que refleja los procesos kársticos y la acción del agua en el paisaje costero.
- Valor ecológico: El suelo fértil y la rica vegetación que rodean las depresiones kársticas del Complejo de Cobijeru son el hogar de una diversidad de flora y fauna. Estos ecosistemas brindan refugio y alimento a numerosas especies, contribuyendo a la biodiversidad de la región.
En conclusión, la Playa de Cobijeru y su entorno representan un patrimonio natural invaluable que merece ser protegido y conservado. Su belleza escénica, su singularidad geológica y su riqueza ecológica hacen de este lugar un tesoro para disfrutar y preservar para las generaciones futuras.